El artículo señala que el índice de PMI manufacturero de China elaborado por Caixin ha registrado una caída en marzo de 51,6 a 50 puntos en comparación con febrero, evidenciando una desaceleración en la actividad económica del país.
En este sentido, la disminución en la actividad manufacturera en China podría tener un impacto en el precio del cobre en el mercado internacional, el cual ha experimentado una disminución del 1,1% en comparación con la semana pasada, situándose en cUS$400,8 la libra.
El informe destaca que la economía china es el principal motor de la demanda mundial de cobre, ya que representa alrededor del 50% del consumo global de este metal. Por lo tanto, cualquier disminución en la demanda de cobre en China podría tener un efecto dominó en el mercado internacional de este metal.
La disminución en el PMI manufacturero chino también se suma a otros factores que han afectado la demanda de cobre en los últimos meses, como la disminución en la producción de vehículos eléctricos y la incertidumbre en la política comercial internacional. En este contexto, se espera que la demanda de cobre se mantenga estable en el corto plazo, aunque las perspectivas a largo plazo son inciertas debido a la volatilidad en el mercado y las incertidumbres económicas globales.
De igual forma, el índice ISM del sector manufacturero de Estados Unidos continuó en contracción con 46.3 puntos, su nivel más bajo en 21 meses y por debajo de las previsiones. El gasto en construcción retrocedió 0.1% intermensualmente en febrero y los pedidos de fábrica disminuyeron por segundo mes consecutivo en el mismo mes, afectados por los costos de financiamiento.
Las tasas hipotecarias a 30 años registraron un alza de 6.4% en la última semana de marzo, pero el índice de solicitudes de créditos hipotecarios para vivienda disminuyó 4.1%. Las contrataciones en el sector privado se incrementaron en 145,000 durante marzo, pero las solicitudes de subsidio de desempleo superaron las previsiones.