Un complejo momento atraviesan por estas horas lo trabajadores de la división Salvador de La Corporación Nacional del Cobre (Codelco), esto debido a que la empresa estatal alista una masiva desvinculación de trabajadores para el primer semestre de 2019.
El agotamiento de sus rajos actuales y los cambios de la divisional por el proyecto Rajo Inca, que ingresará a Estudio de Impacto Ambiental (EIA) en los próximos días, son las principales razones de la posible salida de 1.000 trabajadores.
«Algunas de nuestras operaciones mineras de rajo abierto se encuentran externalizadas y ante el inminente cierre de los rajos por el agotamiento de sus reservas, está prevista una disminución de mano de obra», explicaron desde Codeldo a Diario de Atacama.
“Sólo existirá aporte de mineral sulfurado desde la Mina Subterránea a la planta concentradora en aproximadamente un 60% de su capacidad, lo que implicará la disminución de movimiento y tratamiento de material y la necesidad de ajustar las dotaciones internas como externas y recursos como transporte, logística, alimentación y servicios generales, entre otros, lo que implicará una menor dotación de trabajadores contratistas y propios entre 2018 y 2019”, agregaron desde la estatal a Diario La Tercera.
La cifra de despidos incluye a todos los sectores, aunque desde el núcleo de trabajadores se estima que entre 200 y 300 empleados de planta se verán afectados con estos masivos despidos en la división ubicada en la comuna de Diego de Almagro.
Ante esto, el presidente del Sindicato N°2 de la empresa, Patricio Elgueta, lamentó tener que “enterarnos de este tipo de noticias a través de la prensa, consideramos que es una estrategia que siempre ha hecho Codelco. Lo hace un poco para atemorizar y confundir a los trabajadores».