Esta semana arranca una nueva negociación por el salario mínimo entre el Gobierno y la Central Unitaria de Trabajadores de Chile (CUT), entidad que propuso llegar a los 500.000 pesos líquidos, una renta básica universal, además de congelar los precios de bienes esenciales.
«Esta semana la CUT y el Gobierno ya están en postura de generar un nuevo encuentro a fin de plantear las condiciones de un nuevo salario mínimo», indicó Víctor Riesco, Secretario del Sindicato.
«Sabemos que es una batalla de todos los años, que no tiene fin, y que este año tuvo un incremento de seis mil pesos, pone en juego la figura sobre cuál es el rol que tendrá el Estado ante las posiciones de la CUT y obviamente esta instancia va a generar una gran división a nivel de trabajadores y empresarios, dada la realidad que se están presentando con las restricciones por el Covid», agregó.
Ante ello, expuso que «ya hemos visto como los trabajadores mediante su AFC han ido paleando en ciertos aspectos las condiciones de pago de remuneraciones durante todo este periodo».
«Obviamente la postura del empresario en el sentido de discutir la condición de que no están dadas las instancias para crear o mantener inicialmente la figura del trabajo, mucho más difícil será incrementar el sueldo mínimo para las personas», agregó.
Finalmente, Riesco indicó que «dadas las características de la pandemia, la cantidad de gente que ha perdido empleo está sobre los diez puntos y eso genera una figura que no está dentro de los cálculos de nadie”.
“Esperemos que se llegue a buen puerto en este tipo de discusiones, aunque lo vemos muy difícil por la no generación de trabajo y, obviamente, la alta posibilidad de que las restricciones de la pandemia sigan afectando la economía del país», sentenció.