Una estimación de pérdida de más de 198 millones de empleos en los próximos 3 meses debido a la pandemia del COVID-19, es lo que advierte un informe de la Organización Internacional del Trabajo, OIT.
El efecto de la pandemia global de coronavirus sobre el empleo va a ser “devastador” y superará con creces lo sucedido durante la crisis financiera mundial de 2008-2009. El Covid-19 hará desaparecer globalmente, solo entre abril y junio de este año, el 6,7% de las horas de empleos, lo que equivale a la pérdida 195 millones de puestos a tiempo completo.
Según BBC.com, la agencia de la ONU advierte que 4 de cada 5 trabajadores a nivel mundial ya está sufriendo las consecuencias de los confinamientos totales parciales de ciudades enteras que muchos gobiernos se han visto forzados a imponer.
Los cierres de ciudades, el cierre de negocios, fábricas y de los colegios, las restricciones de viajes y otras medidas para contener la expansión de la enfermedad “han tenido un repentino y drástico impacto en trabajadores y empresas”.
Este tipo de medidas afectan actualmente a 2.700 millones de trabajadores, que representan el 81% de la fuerza de trabajo mundial.
“Los trabajadores y las empresas se enfrentan a una catástrofe tanto en las economías desarrolladas como en las que están en desarrollo”, afirmó a la prensa el Director General de la OIT, Guy Ryder”.
El documento prevé que la región de Latinoamérica y el Caribe pierda 14 millones de puestos de trabajo, mientras que Centroamérica verá destruidos 3 millones de empleos.
Las cifras reflejan tanto despidos como la reducción temporal de las horas. Aún así las cifras, ambas regiones van a tener una pérdida de empleo por debajo del ratio global.
Mientras a nivel global las horas de trabajo perdidas en el segundo trimestre del año van a ser del 6,7% según las estimaciones, en Latinoamérica y el Caribe serán del 5,7% mientras que en Centroamérica se sitúan en el 4,5%.
Dentro de las medidas, los expertos señalan que “los gobiernos deberían encaminar sus medidas es a paliar la menor protección de estos trabajadores” que tienen un acceso limitado a los sistemas sanitarios y a programas de protección social.
Según la OIT, el mundo del trabajo después del coronavirus dependerá de dos factores: la evolución de la pandemia y las medidas políticas que se adopten para auxiliar a las empresas, preservar el empleo y los ingresos, y estimular la economía.
“Las decisiones que tomemos hoy afectarán directamente la manera en que esta crisis evolucionará, así como la vida de millones de personas. Con las medidas correctas podemos limitar su impacto”, aseguró declaró el Director General de la OIT, Guy Ryder.