OPINIÓN: «La minería debe abrir más espacios para el desarrollo profesional de las mujeres»

Recién hace un par de décadas se permitió el ingreso de mujeres a las minas. El mito era que traían mala suerte y desgracia, por lo que el rubro minero era netamente masculino. 


Por Pamela Bordones, Presidenta del Sindicato de Supervisores de Minera Candelaria y Directora de     Equidad de Género de Fesumin.

En lo personal, como Geóloga, con 25 años de experiencia, creo que la clave ha sido que las mujeres hemos demostrado nuestras capacidades y multifuncionalidad.
Hoy, desmitificando un poco, la participación laboral femenina que bordea el 13%, en algunas Compañías, pero mucho menos en otras faenas. Es por ello, que se hace imprescindible abrir nuevos espacios y garantizar igualdad para hombres y mujeres. 
Y precisamente eso es lo que busca la Norma Chilena 3262 (2012), que propone la implementación de un Sistema de Gestión de Igualdad de Género y Conciliación de la vida laboral, familiar y personal. Sin embargo, al ser una norma voluntaria, sólo 48 empresas la han certificado y en la minería, sólo algunas divisiones de Codelco y El Abra. 
En este contexto, uno de los pilares de gestión año 2022 de la Federación de Supervisores de la Minería Privada, Fesumin, es implementar en cada empresa de los sindicatos bases el proceso de certificación de esta norma. Además, instar a las demás empresas mineras a que puedan ser parte de este proceso, ya que no sólo busca mayores espacios para las mujeres, sino que potencia igualdad de condiciones entre hombres y mujeres. 
¿Qué temas se revisan en el marco de la implementación de esta norma? Reclutamiento y selección de personal, participación en cargos de jefatura y toma de decisión, desarrollo de carrera, prácticas de remuneración y compensación, prevención y/o detección de acoso laboral y sexual, salud integral, entre otros aspectos. 
Como Sindicatos base y Federación que agrupa a cerca de mil quinientos supervisores, creemos que constituye un instrumento válido para realizar seguimiento de estándares mínimos que regulan la relación laboral con las trabajadoras. Buscando además, que las empresas se alineen con dichos estándares, para lograr el nivel de “empresas de clase mundial”, donde no solo normas de seguridad y medio ambiente las regulen, sino también el compromiso voluntario de la norma 3262.
Con esto último, por qué no, procurar que llegue a normativa de gobierno la exigencia de certificación, tal como la ISO y OHSAS.
Asimismo, como Mesa de Equidad de Género de Fesumin, estamos dispuestos a entregar orientaciones y herramientas que faciliten y permitan a las organizaciones enfrentar las distintas etapas de implementación de la Norma en la lógica de la corresponsabilidad, con el sello de un mejor país para todos y todas.