“La desaceleración del crecimiento del PIB podría evitar que, con la información del segundo trimestre se confirme la existencia de una recesión técnica (dos trimestres consecutivos de caída)”, señaló la Consultora Gemines.
“Sin embargo, se sigue anticipando una desaceleración pronunciada en la segunda mitad del año, así como la aceleración en la inflación, que podría superar el 14% en agosto antes de estabilizarse y comenzar a bajar a contar del segundo trimestre de 2023”, añadió.
Sobre el empleo, expresaron que “sigue recuperándose de manera diligente, las remuneraciones reales siguen cayendo y tendrán su peor desempeño desde 1985”.
“La depreciación de la moneda, que ha perdido todo sustento por la caída en el precio del cobre, tiende a empeorar el problema. No obstante, el escenario recesivo que se avecina, la política monetaria ha seguido su trayectoria contractiva, alcanzando el 9,75% por primera vez desde 2001”, complementó la consultora.
Ante esto, el Secretario del Sindicato de Supervisores de Collahuasi, Víctor Riesco, comentó que “Después de lo que hemos vivido desde el año 2019 en adelante, tanto con el estallido social como la pandemia, se suman ahora los efectos de las medidas que se utilizaron para poder amortiguar la situación económica que ocurría en el país”.
“La inflación que se generó no solamente a nivel nacional, sino que mundial, y un movimiento de la economía bastante extremo presentando un alza en las tasas de intereses, causó que la mayoría de los dólares se fueran moviendo hacia Estados Unidos por el incremento de valor en su país de origen”, aseguró.
En esa misma línea, Riesco agrega que “lo anterior mencionado, hace depreciar el peso moneda, que lamentablemente aun en el siglo 21 no tiene contrapeso suficiente para aguantar fluctuación de precio de la inflación y lo comentado en el artículo. Cabe destacar que los cambios podrían darse hasta el segundo trimestre del 2023, afectando al mundo de la minería y las recaudaciones que se puedan obtener respecto a los impuestos asociados con esta producción”.
“Es de esperar que toda esta situación se calme según lo proyectado y que ojalá la inflación no supere ese 14%, se mantenga y posteriormente baje para poder recuperar el ritmo de crecimiento y de expectativa económica que se tenía antes de todo este proceso anteriormente comentado.” finalizó.