El proyecto busca aumentar las tasas de reemplazo de las prestaciones proporcionadas a través de la Cuenta Individual de Cesantía (CIC). Estas tasas determinan cuánto del salario anterior se reemplaza durante el desempleo, brindando a los trabajadores un mayor apoyo financiero en tiempos de necesidad.
También, se amplía el Fondo de Cesantía Solidario (FCS), con el objetivo de aumentar las tasas de reemplazo y los límites de prestaciones. Esto asegura una mayor protección para los trabajadores desempleados.
Los requisitos de acceso a las prestaciones se vuelven más flexibles, facilitando el acceso a los beneficios del Seguro de Cesantía. En situaciones excepcionales, como catástrofes o alertas sanitarias, se establecen beneficios específicos para los trabajadores afectados.
El Gobierno brindará un aporte fiscal para garantizar la sostenibilidad del Fondo de Cesantía Solidario, lo que asegura la continuidad de las prestaciones. La intermediación laboral se incluye en el concepto de «apresto laboral», lo que mejora las oportunidades de empleo de los beneficiarios.