Consumo energético de la industria minera creció 33% en los últimos 10 años

El sector es uno de los principales responsable del 14% del gasto de energía del país, y en el caso de la electricidad lidera con 34% en forma indiscutida.

Así lo refleja el último informe entregado por Cochilco con cifras a 2019 -las últimas disponibles-, en el que, sin embargo, se distingue un leve retroceso, menor que 1%, respecto del ejercicio anterior, pero que está en línea con la menor producción de cobre que se registró.

Elevando la muestra, el crecimiento del consumo en la última década ha sido de hasta 33%, lo que no necesariamente se traduce en un crecimiento similar en la producción de cobre, la que solamente ha aumentado en un 7%.

Entre las razones que explican esta tendencia hay algunas que son estructurales, como el envejecimiento de las minas; por lo tanto, existen menores leyes de mineral y mayores distancias de acarreo, situación que en su conjunto aumenta los requerimientos energéticos, especialmente de combustibles.

Restricciones a extracción de agua y desalación En paralelo, durante los últimos años han aumentado las restricciones a la extracción de agua continental. Esto último, ha impulsado a varias faenas a instalar plantas de desalación e impulsión de agua marítima hacia las operaciones mineras, proceso que es altamente intensivo en consumo de energía eléctrica.

A esto se suma la sucesiva mayor producción de concentrados de cobre, lo que incrementa la necesidad de energía, mediante el proceso mismo de concentración de mineral, y por el mayor uso de agua en este proceso.

Lo anterior, a su vez, refuerza la tendencia al uso de agua de mar. Es en este entorno que la energía proveniente de centrales que funcionan con fuentes renovables tomará protagonismo.

El ministro de Minería, Baldo Prokurica, señala que, a 2023 la mitad de la industria minera usará el 100% de energías renovables, “lo que significa un gran avance y compromiso con el medio ambiente, dado que hace cinco años toda la minería usaba energía producida con carbón y diésel. Además, a ese año las mineras incorporarán 13 TWh/año, y en 2021 Enami será la primera minera del país en usar el 100% de energía renovable”, sostiene la autoridad.

Pero además en la industria minera también se ve con buenos ojos el potencial del hidrógeno verde y sus posibles usos en la minería como una fuente limpia de abastecimiento de energía. El vicepresidente ejecutivo de Cochilco, Marco Riveros, apunta a que, a medida que se desarrolle el marco legal necesario para el uso de este combustible y los incentivos del mercado, se irá masificando la producción.