En el Seminario de Sostenibilidad ESG APRIMIN «Desarrollo Sostenible en los Proveedores: Desafíos y Oportunidades», organizado por APRIMIN, se debatió sobre las ventajas de incorporar procesos productivos más respetuosos con el medio ambiente. Mauricio Bravo, subgerente general de Arrigoni Ambiental NFU, destacó que los esfuerzos circulares de las empresas son insuficientes, insistiendo en la importancia de establecer mecanismos para avanzar hacia una economía circular.
Esta transición implica un menor uso de materiales, extender la vida útil de los componentes, reutilizar productos y aprovechar materiales y energías regenerativas. Bravo también indicó que estas estrategias no serán efectivas sin la consideración del mercado y factores como la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP).
En esta línea, los desafíos se centran en entender cómo funciona la normativa, desarrollar infraestructuras acordes a su progresividad, coordinar esfuerzos públicos y privados, y gestionar adecuadamente los sistemas.
El evento también permitió conocer cómo varias empresas mineras están implementando sus estrategias de sostenibilidad.
César Garrido, gerente general de Siderúrgica Huachipato, expuso la visión de su empresa en cuanto a circularidad, relacionada con rediseñar, reducir y reciclar, con el objetivo de disminuir las emisiones de CO2 de Alcance 3. Garrido destacó que en la minería, el 51% de las emisiones son de Alcance 3 y que el 15% de estas, en el caso de la minería del cobre, corresponden a las bolas de molienda.
En este contexto, Huachipato está trabajando para manejar el scrap de acero generado, maximizar la recuperación del acero utilizado e innovar en aceros especiales para optimizar procesos y descarbonizar la minería nacional.
Richard Bennett, jefe de Medio Ambiente Corporativo del Grupo Cbb, trató los desafíos relacionados con la gestión de los aceites usados. Destacó la tasa de valorización energética de estos aceites para el procesamiento de cal en las plantas de la empresa en Antofagasta y Copiapó. Este tipo de desarrollos, explicó Bennett, reducen la huella de CO2 al usar un combustible alternativo.