El Presidente Sebastián Piñera encabezó un nuevo cambio de gabinete en el que se oficializó la salida de la ministra del Trabajo y Previsión Social, María José Zaldívar y el arribo de Patricio Melero a la importante cartera.
Zaldivar esgrimió motivos personales para dejar el cargo junto a un evidente desgaste producido por la pandemia del Covid-19 y los efectos que tuvo en proyectos emblemáticos de su ministerio.
La ex secretaria de Estado asumió la cartera en un momento complejo para el Gobierno, reemplazando a Nicolás Monckeberg en pleno estallido social, el 28 de octubre de 2019, enfrentando el desafío de instituir el nuevo sistema de pensiones que, tras el acuerdo alcanzado en enero de 2020 en la Cámara de Diputados, aún se encuentra en trámite en el Senado.
El que era el principal desafío de Zaldívar, sufrió un cambio de prioridades con la llegada de la pandemia de la pandemia, en el cual la titular de Trabajo debió conjugar la pérdida sucesiva de empleos, con una legislación orientada a proteger la mantención del trabajo y la compensación para las personas que perdieran parte de sus ingresos debido a la pandemia, además de estimular el teletrabajo, en una gestión que generó diversas críticas.
La ex ministra tuvo un papel preponderante defendiendo la postura oficialista en el debate por los retiros de fondos de pensiones, incluyendo el proyecto de segundo retiro, impulsado por el propio Ejecutivo como respuesta a una nueva iniciativa de la Cámara que vulneraba la iniciativa exclusiva del Presidente de la República.
«Quiero dar una cordial y cariñosa bienvenida a Patricio Melero, que ha dedicado toda su vida al servicio público. Conozco su espíritu dialogante, republicano y constructivo que lo distingue. Conoce muy bien todos los desafíos y prioridades que son urgentes y necesarios. Estoy seguro que los sabrá liderar”, dijo Piñera sobre el cambio en el gabinete.