El documento también señala que las importaciones de cobre en China experimentaron una disminución interanual del 7,9% en abril, superando la caída del 1,4% registrada en marzo. Por otro lado, las exportaciones chinas mostraron un crecimiento del 8,5%, aunque a un ritmo más lento en comparación con el aumento del 14,8% del mes anterior.
En cuanto a la inflación en China, ésta solo aumentó solo un 0,1% interanual en abril, siendo la tasa más baja desde febrero de 2021. Por su parte, el índice de precios al productor descendió un 3,6% en abril, en comparación con las expectativas de una disminución del 3,2% y el registro del 2,5% en marzo.
Estos datos refuerzan la situación de una demanda interna débil y la falta de recuperación del sector manufacturero, que aún se ve afectado por las medidas implementadas para hacer frente a la pandemia de Covid-19.
Con relación a los inventarios, se observó una disminución neta de 10.336 toneladas métricas en las tres bolsas de metales durante la semana. La Bolsa de Shanghái registró la mayor reducción en los stocks de cobre, con una disminución de 16.536 toneladas métricas. A pesar de estos descensos, los inventarios acumulados en 2023 muestran un aumento del 15,8% en comparación con el cierre del año 2022.
Estos datos reflejan una situación preocupante en el mercado del cobre, con una disminución en el precio, una caída en las importaciones chinas y una debilidad en la demanda y la economía en general. Los actores de la industria del cobre estarán atentos a la evolución económica global, especialmente en China, ya que sus condiciones económicas seguirán influyendo en el precio y la demanda del cobre a nivel internacional.