El 13 de mayo del 2016 la Contraloría General de la República realizó un dictamen que señala que la aplicación masiva de mensajes WhatsApp, no es una herramienta válida para entregar instrucciones laborales.
Todo comenzó a raíz del reclamo que realizó en su momento el funcionario de Gendarmería de Chile, Héctor Salazar Garrido, quien denunció acoso laboral al recibir una instrucción de servicio cuando estaba fuera de servicio, la Contraloría General de la República confirmó en un dictamen que la aplicación “no es un medio oficial para impartir instrucciones laborales”.
El documento detalló que, si bien “se puede acudir al uso de tecnologías de la información para apoyar la labor administrativa, lo que encuentra su fundamento en los principios de eficiencia y eficacia (…) resulta plenamente eficaz que aquéllas (instrucciones laborales) se realicen por medio de mensajes remitidos a la casilla de correo electrónico institucional que dispone cada empleado”.
De esta manera, son los correos electrónicos el canal oficial por donde los trabajadores deben recibir este tipo de mensajes, objetando el uso de WhatsApp como un medio para enviar “directrices de carácter institucional”.
El tema volvió a tener relevancia ya que hace un par de días, la Contraloría lo recordó a través de sus redes sociales, formando un debate e informando a cientos de trabajadores, que día a día hacen uso de sus propios recursos al recibir instrucciones laborales por este medio.